Que los sueños y esperanzas de Arnoldo Janssen se conviertan en realidad en nosotros y a través de nosotros.
R / Espíritu Santo, deja que nos suceda.

Arnoldo Janssen nos invita a darle a Dios un hogar permanente en nuestro corazón, recordando conscientemente la presencia amorosa de Dios con frecuencia.
R / Espíritu Santo, deja que nos suceda.

Arnoldo Janssen nos invita a alimentarnos como Él lo hizo a través de la Palabra de Dios para convertirnos en verdaderos mensajeros de la Palabra.
R / Espíritu Santo, deja que nos suceda.

Arnoldo Janssen nos invita a detenernos y discernir qué es exactamente lo que Dios quiere de nosotros y a seguir adelante con devoción y compromiso resueltos para lograrlo, independientemente de las dificultades que se presenten.
R / Espíritu Santo, deja que nos suceda.

Arnoldo Janssen nos invita a convertirnos en luz, pequeñas lámparas encendidas con el Espíritu para que las tinieblas del pecado y la noche de la incredulidad disminuyan en nuestro mundo interior y exterior.
R / Espíritu Santo, deja que nos suceda.

(pausa para intenciones personales)

Oración final:

Padre, Hijo y Espíritu Santo, con tu amor que todo lo abarca, le diste a San Arnoldo Janssen la gracia de difundir tu Verbo Encarnado al fundar la Sociedad del Verbo Divino, las Hermanas Misioneras Siervas del Espíritu Santo y las Siervas del Espíritu Santo de la Adoración Perpetua. Ayúdanos a ser fieles al Espíritu de nuestro Fundador y a estar preparados para responder creativamente a las necesidades de nuestro mundo de hoy. Hacemos esta oración a través del Verbo hecho carne, Jesús nuestro Señor. Amén.