- Decálogo para una Espiritualidad de la No-Violencia
- Reconocer y respetar "lo sagrado", "lo de Dios" en todas las personas, incluyéndonos a nosotros mismos, y a cada parte de la creación. Los actos de la persona no violenta ayudan a liberar lo divino en el oponente, y a liberarlo de la oscuridad y el cautiverio...