Las cofundadoras, Madre Maria Helena Stollenwerk y Madre Josefa, Hendrina Stenmanns, nunca fueron llamadas “formadoras”; tampoco hicieron nunca un curso para formadoras. Sin embargo, Helena Stollenwerk y Hendrina Stenmanns pudieron vivir su don divino, su carisma, de tal manera que lo irradiaban a los demás. Tenían la capacidad de formar en el espíritu por el que ellas mismas fueron guiadas e inspirar a otros por el ideal que los llevó a dedicar toda su vida.

Las siguientes reflexiones fueron presentadas en el Seminario de Formadores de Steyl en octubre de 1994 y, con motivo de la beatificación de la Madre María, Helena Stollenwerk, se publicó este material.

Descubrirás algunas de las cualidades y actitudes de nuestras cofundadoras que parecen esenciales para los formadores de una congregación misionera; y esperamos que sea de ayuda para todos los que deseen conocer y amar a nuestras cofundadoras, su carisma y espiritualidad, especialmente en los aspectos en los que pueden ser guías para quienes ejercen el ministerio de formación en la Familia de Arnoldo.