En medio de una humanidad que está sufriendo las consecuencias de la pandemia de Covid 19, ¡esta Navidad será muy diferente! Muchos ni siquiera podrán reunirse con su familia … Tantos todavía lloran la ausencia de sus seres queridos … Otros han perdido sus trabajos y enfrentan inseguridad y miedo … Otros dependen de la solidaridad de quienes comparten lo poco que tienen…

Para quienes consideran la Navidad solo como una fiesta llena de luces y ofertas comerciales, este año será una Navidad triste.

Pero para quienes mantienen la fe y la esperanza en el Dios de la Vida, esta será una Navidad muy especial: la Navidad de esperar tiempos mejores, de la confianza de que la solidaridad es más fuerte que el desánimo, y la certeza de que tenemos un Dios salvador que asume nuestra carne, nuestro dolor y nuestra fragilidad humana.

En la pequeñez del niño Jesús ocurre un gran milagro: Él se convierte en uno de nosotros para que podamos formar parte de la familia trinitaria. Con San Arnoldo, contemplemos al niño Jesús con la certeza y la confianza de que llegará un nuevo tiempo.

Esta será la Navidad de la solidaridad, la esperanza y la búsqueda de la salvación. Que sepamos acoger el momento y dar un paso más, descubriendo la verdadera alegría de la Navidad.

¡Feliz y bendita Navidad!